Don “Nino”, como todos los días se levantó a las 4 de la mañana para rumbear a la zona del Mercado 4 a buscar remedios yuyos para que su compañera de años de lucha, doña María, pudiera colocar en su puestito y luego él empezar con la venta de diarios. Nadie imaginaba que el karai ya no volvería. Un conductor en estado etílico lo arrolló mientras iba en su moto.

“Era difícil no quererlo porque siempre te saludaba en la calle con una sonrisa, era un ejemplo para todo el barrio, un luchador, así era mi papá, mi orgullo”.

Así describe Jorge Notario a su padre, quien falleció trágicamente el domingo pasado, luego de ser embestido por un joven de 23 años bajo los efectos del alcohol que venía a toda bala por la calle.

“En la comisaría le encaré al tipo, no se podía ni parar, nos quitó un pedazo de vida, una parte importante de nuestras vidas, todo por culpa de un inconsciente al volante” dijo Jorge, muy dolido.

“No se imagina el dolor que nos causó, ahora levantarme a la madrugada y no verlo como todos los días es muy doloroso. Mi mamá está destruida, le quitaron a su amor, a su amigo y compañero de toda la vida ya que están casados hace más de 30 años”, agregó.

Lo que pide la familia es que se haga justicia y que su muerte no sea dejada en el oparei, “no puede ser que le den prisión domiciliaria a un criminal, que el dinero no pueda más por sobre la Justicia”, refirió el dolido hijo.

DIO POSITIVO

Esteban Rodríguez Cáceres, causante del mortal choque, dio ka’utest positivo con 0.61.