En la Isla viven actualmente un total de 30 compatriotas, quienes cursan estudios universitarios en 7 entidades de educación superior en calidad de becarios extranjeros. Todos ellos en ese sentido, están conscientes de la situación y preparados para evacuar la zona ante el aviso. Pero cada uno ya tiene su reserva de agua, provistas de alimentos y velas como para 10 días voi, por si se corten los servicios básicos y de comunicación, indicó el embajador paraguayo en Cuba, Bernardino Cano Radil.

Hasta ahora el sistema de la Defensa Civil de Cuba puntualizó las medidas de protección ante la inminente amenaza del huracán “Irma”, de categoría cinco en la escala Saffir-Simpson, y cuya trayectoria representa un peligro potencial para la isla.

La mayor cantidad de paraguayos se encuentra en Cienfuegos, y en Guantánamo, zona donde tendría mayor riesgo de daño por los vientos y peligro de inundación según los reportes meteorológicos.

“La colectividad cubana es bastante disciplinada y organizada, en el anterior del huracán, las fuerzas civiles dirigidos por militares los levantan en camiones para llevarlos a lugar seguro, alejados de la costa”, señaló Cano Radil. Este es el segundo huracán que el embajador paraguayo pasa y que están muy confiados en la organización del gobierno de Cuba para dar respuesta efectiva a este tipo de eventos.

Al toque, nadie se queda en la playa

El embajador agregó que en relación a la Habana se esperan lluvia y vientos pero nada de peligro, pero se calcula que el mar subirá unos metros.

Aseguró que ningún compatriota se encuentra en peligro, de todos modos puso a disposición su celular en caso de emergencia 52139884 registrado en la Cancillería Nacional, para que se comuniquen con él de forma rápida y directa ante cualquier eventualidad o necesidad.

“Después de la fase informativa ellos pasan a la acción, sacan a la gente de la playa, nadie puede quedarse. En el huracán anterior evacuaron a más de un millón de personas en menos de 48 horas, destrozó todo pero ni un solo muerto hubo”, indicó.