GUSTAVO GALEANO. Corresponsal

CIUDAD DEL ESTE. Ayer un mitãrusu encarnó perfectamente al conocido personaje de historietas, el conocido “Superman”, ya que salió despedido del vehículo que manejaba en la caída que sufrió desde un viaducto, en Ciudad del Este.

El tránsito mañanero, encima que opa’ã a esas horas, fue interrumpido por un impresionante accidente “volador” que a más de uno lo dejó sorprendido por la manera en que ocurrió la tragedia, que dejó chipapepaite al rodado involucrado en el percance.

Sin embargo, el conductor ni siquiera llegó a estornudar por lo sucedido, según se pudo observar en el escenario de la desgracia con muchísima suerte. Ni que el “hombre de acero” voi.

El accidente rutero se registró a eso de las 11:00 de la mañana a la altura del km 5 1/2 de la Ruta 7, que tuvo como protagonista principal al joven Carlos Alberto Aranda López, de 20 años de edad, quien salió despedido de su vehículo como el famoso “gato volador” a juzgar por la expresión de algunos testigos que hablaron con la Policía.

El micro’i quedó convertido en una verdadera chatarra, ya que quedó totalmente inservible.

ESQUIVAR A UN JAGUA’I

Carlos Alberto comentó a los intervinientes cómopa sucedió el espectacular percance carretero. Venía trayendo una mercadería al centro esteño, cuando de la nada se le cruzó un perro ¡en medio mismo del viaducto!

El joven le pegó un volantazo, sin dudar, para salvar la vida del pichicho, que ni se dio por enterado del tema. El rodado se llevó el barandal y una columna de cemento antes de tocar el piso, unos cinco metros abajo.

OHAYHU

Carlos es un amante de los animales, por eso esquivó al perro.