• LUCHADOR. De chiquito vendía dulces en los semáforos y la vida lo llevó al mundo de la fotografía, el que dejó por la cocina

LAMBARÉ. Fue lustrabotas, vendedor de frutas, de golosinas en los semáforo y hasta cebador de tereré a los choferes… Ya desde que era un niño, César Villalba supo del sacrificio como medio para ganarse la vida honestamente, siempre fue así.

Y la vida le siguió poniendo pruebas que superando, además de llevarlo a los más diversos campos de trabajo. Hoy con 55 años es un chef profesional y trabaja en el área culinaria desde hace más de 10 años.

Contó que su pasión por la cocina empezó desde chiquito, ya que mientras su mamá salía a trabajar y también sus hermanas, él era el encargado de hacer para la comida del día.

“Siempre quise tener lo mío, siempre me gustó tener mi propia platita y trabajaba de lo que sea y con el tema de la cocina desde niño me gustaba. Cuando era lustrabotas me acuerdo que 10 guaraní ganaba por cada lustre y a veces juntaba 100 guaraní al día que era la comida de la semana por ahí”, contó César, quien tiene el apodo del “Kocinero”.

César también recordó los tiempos cuando estaba en el mundo de la prensa. Contó que pasó 22 años de trabajo como reportero gráfico en el recordado diario Noticias, lugar donde se formó como profesional y recorrió varios países.

“Yo me inicié en Noticias como reportero, pasé tantos momentos felices como también de peligro, estuve en el golpe que derrocó a Stroessner como también en el tema de Lino Oviedo. Tengo tantos recuerdos que hoy día a veces sueño con que sigo en el diario”, terminó diciendo el “Kocinero”, quien luego de haberse cerrado el medio se metió en el mundo de la cocina luego de un empujón que le había dado un compadre al decirle que tenía un gran talento para el mismo.