EE. UU. “Mis luces de crecimiento se habían roto, entonces tuve que mover mis plantas al porche por unos 15 o 20 minutos. Cuando regresé para volver a ponerlas en el invernadero, me di cuenta que mis gatos se las habían comido” escribió una doña, quien compartió en las redes el video de la extraña situación.

El tema es que no se trataba de cualquier planta, sino de plantitas de marihuana que ella tenía en su casa. En el material se ve la escena del desparramo y de repente aparecen los causantes del incidente: uno de sus gatos estaba tirado debajo de una silla, con las extremidades extendidas y apenas se movía, totalmente volado; mientras su cómplice, otro gato, parecía un poco más activo, por lo que parecía que no llegó a masticar ninguna planta.