• HESÚKENA. Un humilde agricultor iba guatahápe rumbo al encuentro con la Virgencita cuando fue interceptado por motochorros. Uno de ellos le dio una estocada en su pecho mbytetépe

Mauro Adorno Cardozo, de 30 años, iba rumbo a Caacupé movido por la fe. La distancia que iba a recorrer era realmente grande. Pero todo valía con tal de no fallarle a la Santa Patrona. Sin embargo, por esos caminos misteriosos que tiene la vida, toda su muestra de religiosidad, que salía desde su corazón, se vio apagada por el ataque ruin de motochorros.

Estos malditos desgraciados que llevaron la desgracia a miles de familias en nuestro país una vez más fueron protagonistas de un triste hecho. A la altura del kilómetro 237 se produjo el “aprete”, cerca de las 4 de la madrugada. Viendo el peligro, la víctima introdujo su mano en la riñonera para entregar lo poco que tenía. En ese momento, desprevenido, ligó una estocada mortal en su pecho a traición, que acabó con la humilde vida de un hombre de campo quien residía en la localidad de La Candelaria, Juan E. O’Leary.

Horas después, cayó el principal sospechoso, identificado como Augusto Vergara Salinas, de 28 años de edad, quien posee dos antecedentes por asalto, según informaron desde la Comisaría 21.ª de la colonia Torín, ubicada entre los distritos de José Domingo Ocampos y J. Eulogio Estigarribia. El tipo fue reconocido por un mitã’i de 17 años, quien es el sobrino de la víctima.

Estaba muy borracho y no recuerda nada, ndaje

El supuesto autor del hecho manifestó que no recordaba lo que pasó porque gua’u que estaba muy borracho. Según el testimonio del sobrino del fallecido, quien lo acompañaba en ese momento, fue Augusto el que descendió del biciclo para intimar a su tío a que entregue sus pertenencias, ínterin en que el delincuente confundió el movimiento de la víctima como un peligro para él y procedió a herirlo mortalmente con un estoque.

SE DESPLOMÓ

Cayó a 50 metros

El fallecido tras recibir la estocada corrió pero cayó a 50 metros del lugar del hecho.

EN EL MOMENTO

Tuvo un shock he’i doctora

La médica forense diagnosticó muerte por “shock hipovolémico por herida producida con arma blanca”.