- RASTROS. Su historia fue publicada en Crónica porque prácticamente no sabían nada de ella
Pasó casi medio siglo y una sobrina sacudió los archivos. La memoria viajó a San Juan Nepomuceno presentando la historia de una niña que había desaparecido, presuntamente a causa de un secuestro perpetrado por una familia argentina que la arrebató de su familia y de su país llevándola a un destino que nadie sabía.
A Dolores Martínez le había tragado la tierra y no se le conocían fotografías. Nada más sabían que era criada. La sobrina, Jorgelina Martínez Carrera, la rastreó por redes y habló con nosotros, imaginándose noticias rápidas y buenas, improbable en casos donde se tienen casi los mismos datos que una cédula.
Pero las noticias aparecen y apareció Yolanda Vargas de Carrera, quien vendría a ser cuñada de Dolores Martínez. Esta persona se comunicó con nuestra Redacción y clavó datos claves, removiendo los pisos de la búsqueda de la niña perdida.
“Ella nació el 12 de mayo de 1949 y el nombre de su madre es María Brígida Martínez, ya fallecida. Es la hermana perdida del señor Bienvenido Carrera. El señor Vicente fue quien dio a la niña”, precisó Yolanda Vargas.
La llevaron a Santo Pipó
Las personas que recibieron a la niña eran Fulgencio Candia y Victoria Monzón, de manos del tío Vicente. Pero el dato más estratégico es que la niña rumbeó hacia Santo Pipó (provincia de Misiones). Estiman que podría estar viviendo allí con el nombre de Dolores Martínez o Dolores Carrera. Nuestra entrevistada cree que la persona en cuestión nunca dio señales a razón de estar molesta al hacerse eco de rumores de que había sido vendida, algo totalmente falso, según ratificó.
“Vamos a fondo con la búsqueda”
Muchos de los secretos familiares encierran, a veces, historias no ciertas que van creciendo a fuerza de rumores y así van también distanciando personas e intereses. Lo que une ahora a la familia Martínez y a San Juan Nepomuceno es la tía Dolores, que fue una niña que se había perdido medio siglo antes. Llamémosle, por cosas o causas del destino. “Vamos a ir a fondo con esta búsqueda, nuestra familia siempre se movió para saber la verdad”, dijo Jorgelina.
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