Muchos son los casos que a diario se escuchan de muertes que, por las condiciones en que se dieron, a toda vista parecían imposibles. Pero no lo son. Este es el caso de un humilde albañil de Capiatá, quien al caer de su andamio a solo tres metros de altura más allá que algún hueso roto lo que encontró fue la muerte.
De acuerdo a los datos policiales, la víctima fue identificada como Miguel Ángel Recalde, de 47 años de edad. El mismo estaba sobre un andamio construyendo una muralla. En un momento dado, al parecer la madera sobre la que estaba parado cedió y cayó peso muerto sobre una base de cemento que sería de una pileta.
Aparentemente el hombre tuvo tanta mala suerte que cayó de hacia atrás, pegando un golpe seco en la cabeza con el piso que fue lo que le provocó el deceso.
EN PLENA MAÑANA
La desgracia oiko minutos después de las 11 de la mañana en el barrio Sol Naciente de Capiatá.
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