Una oleada de asaltos sangrientos se desató entre la noche del lunes y la madrugada del martes, y tuvo en alerta roja a los uniformados. El primer hecho de sangre y robo oiko en la Zona Sur de Fernando de la Mora, cuando unos motochorros sanguinarios interceptaron a una mitãkuña de 16 años. Cuando le pidieron el celular la víctima se negó, ho’u dos balazos y rajaron del lugar sin llevarse nada.

Uno de los impactos le pegó en la mano y terminó su trayectoria en su cadera. El segundo proyectil le rozó el codo izquierdo. La joven fue llevada al Hospital de Trauma para su atención, donde le dieron de alta luego de sacarle del cuerpo los plomos que recibió.

El segundo jejapi ocurrió en el barrio La Conquista, Ñemby. Allí apretaron a Zumaida Reyes (30), ella se resistió y ligó una bala en la panza. También fue llevada a Trauma.

El tercer ñemonda fue en el barrio Industrial de San Lo, donde un menor de 16 años recibió un balazo en la pierna por negarse a entregar su celular. El último hecho de sangre sucedió en el barrio Tarumá de Ypané, cuando Elizardo Ozuna Espínola (18) fue interceptado por los cacos motorizados, quienes le dispararon pero finalmente no se llevaron nada.

Presumen que son los mismos delincuentes

Los investigadores de la Policía Nacional tienen la sospecha que los autores de los 4 asaltos con sangre serían del mismo grupo de delincuentes. “Creemos que son los mismos delincuentes, por el accionar violento que tienen”, he’i el capo de Investigaciones, subcomisario José Ayala al Canal 9. Los agentes están tras los pasos de estos asesinos en potencia, para ponerlos a cargo del Ministerio Público.