• LUSTRABOTAS DEL CONGRESO. Tiene 13 años y todos los días acude impecablemente vestido

La de hoy es una historia de esas que nos impulsa a creer de que no todo está perdido. De confiar que una generación se levantará y realizará grandes cambios –para bien– en nuestro país. Hablamos de Rodney (13), un nombre que puede no decir nada a muchos y que, sin embargo, es uno de los miles de laburantes anónimos que –pese a su corta edad– riegan con sus esfuerzos las ganas de ayudar a su familia y el poder cumplir sus metas en busca de un mejor futuro.

Todos los días, Rodney sale bien temprano de su casa, ubicada en la Chacarita. Lo hace impecablemente vestido. Traje, camisa bien planchada, corbata y los zapatos bien lustrados. Así, bien elegante, se dirige al trabajo. Cualquiera diría que va a alguna oficina. Pero no. Es lustrabotas en la Cámara de Senadores.

Sus fotos, lustrando los calzados de los funcionarios del Congreso, se hicieron virales en las redes sociales y mucha gente valoró el esfuerzo y el sacrificio que realiza el pequeño para salir adelante honradamente. Amabilidad, respeto y una sonrisa en el rostro resaltan en él al momento de hacer brillar los zapatos de los parlanchines y funcionarios en el “plato volador”.

A la consulta del porqué va a trabajar trajeado dijo que “el lugar de trabajo se debe respetar. Estamos en el Congreso y este sitio se respeta”, dijo. “Aquí vengo todos los días. Por la tarde voy al colegio a estudiar. Ambas actividades lo hago con mucho amor. Algún día me gustaría estudiar Ciencias Políticas”, finalizó.

Le regalarán un traje

“Pollito –como es conocido Rodney en el Senado– cursa el 7.ª grado en el Colegio República del Brasil y en sus libretas figura una hilera de 5 de punta a punta. “Me gusta estudiar, aprender de todo”, comentó.

Entre otras cosas dijo que le encanta jugar al fútbol y que también sueña ser un gran deportista. “Me gustaría algún día jugar en Boca Juniors”, dijo. Por su parte, tras conocerse la historia de Rodney, una conocida sastrería se comprometió a regalarle un traje purete.