TURQUÍA. Yilmaz Fikriderin (38) se lanzó a un negocio relacionado con el ego y autoestima en el mundo virtual. Anda por las calles de Adana ofertando likes, retuits y followers. “Hay gente que se sorprende, que lo encuentra divertido o absurdo. Pero tengo clientes que necesitan seguidores”, he’i.

“Hay gente que quiere convertirse en un fenómeno social y ofertan sus productos en internet. Hay muchas webs que venden seguidores, likes y comentarios. Así que me dije, ¿por qué no hacer lo mismo?”.

Fikriderin comenzó su propio negocio de venta online, pero luego se le ocurrió llevar su negocio a la calle: “Aunque el uso de internet se ha extendido mucho en los últimos años, en Turquía hay todavía algunas barreras que no hemos superado. Hay mucha gente que no se siente segura al dar su dinero a través de la red. A la gente le gusta sentir el producto, comprobar que funciona”.

PRECIOS

Instagram: 1.000 seguidores, seis liras (85 céntimos de euro); 1.000 likes, cinco liras, 50 comentarios, cinco liras.