La gente ya perdió el miedo, la vergüenza y la moral hace rato, al parecer, nde bárbaro. Esta vez resultó víctima de un atraco vergonzoso un humilde oratorio, que fue visitado por un trío de cachafaces.

El tema oiko en el conocido oratorio “Angelita”, ubicado al costado de la ruta en el ramal Carapeguá-Acahay, en la compañía Calixtro, de la ciudad de Carapeguá.

Estos innombrables ingresaron al lugar sagrado a eso de las 2:40 horas de ayer, y una vez adentro del recinto sacaron un mazo y cortahierros ha oity hese hilo.

Destrozaron toda la estructura donde estaba montada una caja fuerte, en donde los creyentes de “Angelita” depositaban sus ofrendas y donaciones.

Lo indignante de este caso fue la profanación de un lugar de adoración del pueblo de Carapeguá y los alrededores de esa localidad.

Vyresaiterei nio lo que llevaron, ya que los encargados de la comisión del oratorio suelen recoger las ofrendas a la tarde, justamente para evitar las tentaciones de los rateros.

Todo este insulto al pueblo católico quedó plasmado en el “ojo de Dios”, una cámara de seguridad que estaba colocada en un lugar estratégico que captó con lujos de detalles el proceder de esos arrieros sacrílegos.

Es más, los ñatos ingresaron hasta la caja fuerte con el rostro totalmente descubierto.

Los ladrones causaron más daño moral en el robo

En la filmación se les ve a dos hombres ya mayores y aparentemente con los sentidos bien puestos para discernir entre el bien y el mal. Uno de los mondahácho tendría entre 45 y 50 años y el otro katu de 35 a 40 años.

“Una total falta de respeto para la ciudadanía fue este robo, la gente ya perdió el respeto, no se llevaron una gran suma de dinero. Pero el mayor perjuicio fue la destrucción del pedestal y la caja fuerte.

Además del tremendo daño al ánimo de los creyentes”, he’i el subjefe de la Subcomisaría 4.ª, el suboficial inspector Ricardo Caballero, en comunicación con Crónica.

Los del Departamento de Investigaciones fueron a levantar las evidencias para llegar a estos desgraciados que no tendrán perdón divino seguramente. Es cuestión de horas para que identifiquen a los ñatos para ponerlos a cargo de la Justicia, informaron.