Después de toda la guerra que se armó ayer en la zona de Ciudad del Este a consecuencia de la decisión del Poder Ejecutivo de meter en una estricta cuarentena jey al Este del país, autoridades nacionales y departamentales se reunieron y buscaron nuevas alternativas.

Ante el nervio incontrolado de los paranaenses que provocó un momento de mucha violencia en esa zona del país, los capetos decidieron apaciguar a los pobladores con una medida un poco más llevadera, más para los trabajadores de la zona.

En ese sentido, Roberto González Vaesken, gobernador de Alto Paraná, indicó en conferencia de prensa que pidieron a los enviados del Poder Ejecutivo el permiso para que puedan laburar de 5:00 a 17:00 horas, con la condición de que todos los pobladores se comprometan a cumplir con el protocolo de usar el tapabocas y lavarse las manos para no contagiarse. Pero las medidas se vuelven más estrictas una vez que caiga la noche en la zona y por ello, una vez terminada la jornada laboral, todos deben retornar a sus hogares. “No salir a no ser que sea una cuestión de emergencia”, dijo el gobernador. Por eso, un grupo de trabajadores decidieron desconvocar una manifestación que estaba prevista para la tarde de ayer, debido a que estaban de acuerdo con las medidas adoptadas por las autoridades.

INVESTIGAN

Por otro lado, representantes del Ministerio Público ya se encuentran investigando los saqueos y daños materiales que afectaron a varios comercios de la zona.