Una familia sigue sin creer el terrible desenlace que tuvo una de sus integrantes que tenía apenas 16 añitos y toda una vida por delante.

El pasado 28 de marzo una jovencita identificada como G. C. desapareció de su casa en el barrio San Marcos de la ciudad de Natalio, departamento de Itapúa. En ese momento la menor se encontraba en compañía de una amiga, pero luego se fue para nunca más volver.

“Esa misma tarde mi papá hizo la denuncia en la comisaría distrital de Natalio, los policías no la buscaron, nos pasamos buscándola todo el tiempo. Hay testigos que le vieron cerca de la Plaza Municipal y cuatro días después nos avisan que se le encontró ahorcada en un monte”, comentó a Crónica Gloria C., hermana de la joven fallecida.

La mujer con la voz temblorosa y llena de impotencia siguió contando lo sucedido y afirmo que vecinos tuvieron que bajar el cuerpo, ya que la médica forense y el asistente fiscal ni se acercaron al cadáver, más allá de redactar un acta donde pusieron datos falsos, como por ejemplo que la adolescente fue hallada después de un mes.

Para empeorar aún más la situación, los policías intervinientes no restringieron la zona donde fue encontrado el cuerpo, dejando que toda la gente vaya a “curiosear”.

La familia desconoce del porqué G. C. huyó, ya que solo tienen conocimiento que la misma estaba en la casa en compañía de una amiga y que esta última fue también a su domicilio, momento en que la ahora fallecida desapareció.

Los familiares sospechan que la joven fue asesinada

Gloria C. dijo que si el asistente fiscal y la forense hacían bien su trabajo se podría determinar la causa de la muerte. “Es imposible que mi hermana se haya suicidado con su abrigo, tenía los brazos maniatados a su campera, no hace falta ser un fiscal o forense para darse cuenta de eso”, afirmó Gloria.

Además, comentó que el padre de la joven tenía que llamar constantemente a la comisaría para saber si los policías pudieron investigar algo al respecto.

Lo que más indigna de la situación es que las autoridades intervinientes miraron desde lejos el cuerpo y familiares y vecinos tuvieron que envolverla con su campera para que luego sea enterrada.