Destrozos y gran susto generó a pobladores de J. Eulogio Estigarribia la caída repentina de granizo a bulto que se desató ayer en esa zona.

“Pensé que venía el fin del mundo, me arrodillé y empecé a rezar. Jamás pasé una situación así, el ruido que escuchamos no sé con qué se puede comparar, era aterrador”, dijo doña Laudelina Núñez, de 72 años, en relación a la granizada que azotó en la madrugada de ayer la zona J. Eulogio Estigarribia, conocida también como Campo 9, en el departamento de Caaguazú.

Según el relato de la doña, el fuerte viento y la granizada duraron casi 15 minutos e inició alrededor de las cinco de la mañana. “Demasiados destrozos dejó, yo sigo asustada, nunca vi algo así. Varios cultivos quedaron destrozados, heta cherapicha mboriahu ojeperjudicá”, lamentó la doña.

Varios cultivos destrozados, casas destechadas o con agujeros en los techos, así como montañas de granizo en las calles y patios era el panorama que dejó la tormenta. “Muchas personas se quedaron sin casa, de repente se escuchó el ruido, nos asustamos demasiado grande, es la primera vez que pasa algo de esta naturaleza en este lugar. Hace 52 años que vivo acá y nunca vi algo como esto, parecía que hasta la tierra se movía, creímos que después vendría un terremoto, acá la gente es muy creyente y rezamos mucho”, añadió Laudelina.

“No sabemos por qué pasa este tipo de cosas, no parecían simples granizos, eran bolas de hielo, hasta pajaritos muertos quedaron esparcidos por todos lados, árboles caídos, todo el lugar quedó como una zona en donde pasó un huracán”, contó la doña aún asustada. Laudelina indicó que esperan la ayuda de las autoridades para que les hagan llegar chapas que es lo más urgente en estos momentos, ya que muchas casas quedaron destechadas.

“La naturaleza estaba rabiada”

“La verdad, ninguno de los pobladores vivió algo parecido, parecía que la naturaleza estaba rabiada y nos estaba castigando por algo. No había hacia dónde escapar, era la lluvia torrencial, el fuerte viento y los enormes granizos, todo junto duró de 10 a 15 minutos, pero parecían eternos”, relató doña Laudelina.

“Las aves de corral fueron también afectadas, muchas gallinas murieron golpeadas por el hielo que parecía que nunca iba a terminar”, dijo.

Llovió a cántaro en el Chaco

Las intensas lluvias que cayeron de manera repentina también llegaron a las zonas del Chaco, como Loma Plata, donde las calles quedaron colapsadas por los raudales.

Otra de las zonas afectadas por las intensas lluvias fue el departamento de Concepción, en donde la zona de Aquino Kue quedó bajo agua repentinamente, según un video enviado en redes sociales por José Díaz.