El local se reservó derecho de admisión y una participante trans no pudo participar del certamen para el cual se preparó.

Su sueño se iba a hacer realidad. Romina Ávalos iba a participar por primera vez en un certamen. Es trans y por eso se preparó el doble para llegar espléndida en la noche final del concurso, que fue el sábado en una discoteca de Sanlo.

“Yo me produje y me fui para el concurso donde tenía que participar, pero no me dejaron ingresar en la discoteca”, comentó Romi, quien llegó al lugar con muchos de sus invitados, pero le informaron que ella no podía ingresar. “Me dijeron que no y simplemente por ser trans, eso es una discriminación”, comentó ella. De hecho, este así como otros locales nocturnos se reservan el derecho de admisión.

– ¿Cómo te sentiste?

– Me sentí muy mal, es un concurso que vengo remando desde hace meses y que en la noche final me hayan hecho esto. Invertí mucho dinero para llegar hasta ahí y no me pude presentar porque a la disco no le gusta que una trans participe.

– No es la primera vez que una trans se presenta en este concurso…

– No es la primera vez, desde hace unos años que vienen participando trans en este evento. No creo tampoco que la organización deba comunicar a la discoteca la part icipación de una trans, ya que nadie pensaba que ellos no querían.

– ¿Alguien te dio una explicación?

– Yo compré una mesa para mis invitados, me cobraron sin problemas y después, cuando iba a ingresar, los guardias no me dejaron. Había un encargado de los guardias, yo quería preguntarle por qué no me dejaban ingresar. Supuestamente es política de la discoteca.

– ¿Y qué pasó con lo que pagaste?

– Me quisieron devolver, pero eso no es nada. La plata viene y va, pero el mal momento y la discmiminación que pasé no tienen precio. Había invitados conmigo y no pudimos ingresar.

– ¿Qué dijo la Organización Miss Tunning?

– Ellos estuvieron conmigo en todo momento, apoyándome, pero no consiguieron que yo ingrese. Con Miss Tunning no tuve problemas, me respaldaron en todo momento.