El que puede tener un «aire» con este calor y de japa luz de la Ande de por sí es un afortunado, pero no todo es «color de rosa» ndaje porque a la larga te puede dar dolor de garganta si no regulas el frío.

Lo ideal es mantener las temperaturas del aire acondicionado entre 20ºC y 22ºC durante el día y entre 23°C y 26ºC en las noches mientras se duerme.

El frío que expulsa el aparato de refrigeración causa alteraciones en los sistemas de defensa natural de la nariz y la garganta, según explicó el doctor Robert Núñez, a quién le apuran en las redes con preguntas sobre la salud.

“Con el uso del aire acondicionado en verano el ambiente se vuelve más seco, mermando también estos sistemas naturales de defensa”, posteó el médico.

Mencionó los síntomas de la faringitis que son la sensación de sequedad, las molestias en la zona de la faringe, el carraspeo o toser levemente para aclarar la garganta y evitar estar ronco, además de la sensación de quemazón o una tos persistente.

A veces estos síntomas se confunden con el ómicron, pero ante la duda hay que consultar mante. “Si presentan otros síntomas como dolores musculares, fiebres, diarreas, vómitos, falta de aire o dificultad para respirar recomiendo acudir al médico para descartar una infección por Covid”, puntualizó.