En el entorno de Nilsa Z. (29), asesinada por su ex novio, Antonio I, la preocupación estaba instalada. Sabían que la forma en la que él la trataba a ella no iba a terminar de buena manera. Hablaban de una agresividad tremenda y hasta de amenazas luego de la separación.

Pero Nilsa, más allá de haber terminado con su pareja por esto, decidió ir a visitarlo por ser el cumpleaños de éste.

“Familiares y amigos de Nilsa manifestaron que el hombre era bastante posesivo. Le exigía que no use faldas cortas, que no se junte con amigas y amenazaba que la iba a matar y luego él se suicidaría, si es que le dejaba”, dijo en contacto con la 730 AM la fiscal Gladys González, quien tiene a su cargo la investigación.

“Sus familiares la habían advertido que deje a su pareja, porque todos sabían que la tenía amenazada, que era agresivo y andaba siempre armado”, comentó la representante del Ministerio Público.

Igualmente, la fiscal contó que Nilsa decidió visitarlo, para felicitarlo y llevarle un regalo, que compró del supermercado, tras salir de su trabajo. Sin embargo, esa visita fue una mala idea. Se cree que se generó una discusión que terminó con el peor desenlace.

“Había restos de proyectil en el baño. Tenemos como presunción que el hecho ocurrió en el baño. Se quedó un proyectil que debemos extraer para determinar el calibre. La madre precisó que el hombre siempre se manejaba con un calibre 38”, precisó la fiscal González.