La empresa neerlandesa U-Boat Worx quiere revolucionar el mundo de los submarinos y empezar a fabricarlos para algo más que ver animales en el fondo del océano o hacer puré barcos enemigos.

En este momento se encuentran trabajando en el proyecto Nexus, que está construido alrededor de un “casco de presión elíptico transparente” que mide 35 metros de largo, 7,6 metros de ancho y 7 metros de alto, creando unos 150 metros cuadrados de espacio útil en el interior que se puede utilizar para fiestas, casorios, cumpleaños, cena de laburo, era eréa, con capacidad para 120 pasajeros incluida la tripulación.

Lo bueno es que puede llegar a 200 metros de profundidad y lo más probable es que nadie te quebrante la cabeza con el “bajen la música”. Eso sí, el que famoso quiere salir a fumar o el incorregible que quiere ir a hacer pis “afuera”, se va a tener que quedar con las ganas.

Para que la farra no sea “asfixiante”, tiene 14 ventanas que miden casi 5 metros de diámetro cada una. En caso de que le suceda algo catastrófico al submarino durante una excursión, también lleva un sistema de energía de emergencia que mantiene los sistemas críticos encendidos y en funcionamiento durante 96 horas, cuatro días completos, manteniendo a los ocupantes seguros hasta el rescate.