En el fútbol del interior suelen ocurrir los hechos más insólitos. Compra de partidos, finales violentos, hinchas borrachos dentro de la cancha, ingreso de animales de toda laya, agresiones, ere erea voi.

Y una cosa así fue lo que sucedió en los minutos finales del partido que disputaron los clubes 30 de Agosto y Universo de Capiata, en la categoría sub 18, cuyo resultado estaba empatado 2-2 hasta prácticamente el minuto 90.

El marcador clasificaba al Universo para la liguilla final del torneo, pero en la última jugada, el 30 de Agosto consiguió el tercer tanto del partido, que finalmente dejaba eliminado a su rival. Ahí nomás, los fanáticos del «Uni» entraron en modo «guerrilla» e invadieron el campo de juego con una clara intención: garrotear al árbitro. ¿El motivo?, consideraron que el tipo adicionó demás la hora.

En un sapy’aite se armó la hecatombe, la debacle total. Al verse acorralado, el réfere no tuvo de otra que meterle un pique de aquellos para evitar ser agredido. Estaba a punto de lograr su objetivo, pero una patada/zancadilla desde atrás, lo desbarató por completo al suelo, interín en que unos cuantos aprovecharon para propinarle patadas anga.

Felizmente, algunos adherentes del cuadro perdedor tuvieron la cabeza fría y lo protegieron de seguir ligando; lo levantaron, para luego escoltarlo hasta los vestuarios, lo mismo que a sus asistentes. Si bien quedaron machucados por los golpes, los tres árbitros finalmente pudieron salir sin inconvenientes de la cancha y rajar al toque del lugar.

En el video de abajo, captado por los aficionados desde las gradas, se puede notar el tremendo susto con corrida que sufrió el juez principal. Y un hecho lamentable: ni un oficial de Policía, de los pocos que resguardaron la seguridad, fueron a socorrerlo.