La guerra entre Rusia y Ucrania sigue al rojo vivo con feroces ataques que se dieron en las últimas horas en la ciudad de Severodonetsk, una ciudad estratégica en el este ucraniano donde los rusos no lograron por el momento tomar por completo, pero si llegaron a sacar de la mayor parte al ejército local.

Es «aterrador», dijo el lunes el presidente ucraniano Volodimir Zelenski, en relación a la situación que se está viviendo en esa zona del país, asegurando que “el coste humano de esta batalla para nosotros es muy alto. Es simplemente aterrador”.

Las luchas en Severodonetsk se están dando desde hace semanas, en un enfrentamiento en el que se busca controlar el Donbass.

«Los combates en las calles siguen (…) los rusos continúan destruyendo la ciudad», describió el reporte de las milicias ucranianas en Facebook, junto a imágenes de edificios en ruinas o en llamas.

En la ciudad vecina de Lisichansk tres civiles, entre ellos un niño de seis años, murieron por los bombardeos en las últimas 24 horas, según el gobernador.