Clara Ruiz Díaz, jueza penal, condenó a dos años de cárcel con suspensión de la ejecución de la pena a una de las dos mujeres que el pasado 10 de octubre habían hecho sentar en un brasero a su rapichá por supuestamente chismosear por ellas.
Según los antecedentes, dos mujeres habían llegado hasta un puesto de venta de poha ro’ysa en la ciudad de Mariano Roque Alonso para encarar a la encargada del puesto por supuestamente cuentear por ellas en todo el barrio.
Las tres mujeres empezaron a sacarse los trapitos sucios y luego ya se vino el akáchara. Posteriormente, las dos mujeres hicieron sentar en un brasero a su rapichá quien sufrió varias quemaduras.
Por este hecho, las doñas fueron a parar en el Buen Pastor. Ahora, en un procedimiento abreviado, una de las acusadas ya quedó libre mientras que está pendiente la diligencia para la otra involucrada en el hecho.
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