Una vez más, la Cámara de Diputados recurrió al “cuarto intermedio”, para seguir mañana, desde las 14:00 horas, el gastado tema del pedido de juicio político a la fiscal general del Estado, Sandra Quiñónez. Calcado a los dos días anteriores, aunque un poco más relajados, los diputados gastaron saliva para seguir con los insultos e improperios de uno a otro sector.

Esta vez, tuvo un poco más de relevancia el asesinato del joven Rodrigo Quintana, como causa para buscar las argumentaciones que pudieran pesar para lograr la sustitución de la referida fiscal; sin embargo y pese a que todos los oradores coincidieron que se trató de una desgracia, no hubo acuerdo en otros puntos.

Pasaditas las 17:30 horas, de nuevo surgió la moción del “cuarto intermedio” para seguir con el debate, mañana, después de la sesión ordinaria marcada para las 08:30 horas. Faltando incluso al mal llamado reglamento interno, se dieron conversaciones entre los diputados, hasta que el presidente, Carlos María López, pidió que haya orden en la sala.

El diputado Colyn Soroka, fue uno de los últimos oradores y pidió concretamente que la sesión continúe mañana a las 14:00 horas, reconociendo en medio de risas, que ayer tenían los votos para someter a juicio político a Sandra Quiñónez. “Ayer teníamos 53 votos, pero perdimos el tiempo; hoy creo que ya amanecimos con 47 nomás ya”, dijo, para dar paso a una carcajada generalizada.

Tras esto y con voz de milico pyahucho, el presidente de la Cámara Baja, López, cortó por lo sano y levantó la sesión.

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