Un triste amanecer tuvieron los pobladores de Minas Cue en Yvycuí, departamento de Paraguarí, ya que delincuentes entraron a la humilde capilla de la comunidad y no era precisamente para rezar.

Los feligreses se llevaron una desagradable sorpresa a tempranas horas de la mañana de este martes cuando pillaron que la puerta de la capillita de la comunidad había sido violentada.

La angustia se apoderó de ellos cuando entraron a la casa de Dios y pillaron que el Santo Patrono de la comunidad, San Juan Bautista, no estaba en su nicho, además se percataron de que el crucifijo principal tampoco estaba dentro del oratorio.

Según la creencia popular, los santos robados son más milagrosos ndaje, pero el temor de toda la comunidad es que los delincuentes que entraron a robar en la casa de Dios, usen los objetos sagrados para ponerse bien con satanás.

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