En una jornada donde las ejecuciones y ataques de sicario marcaron la hoja de ruta de un país que ve discursear maravillas ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) a su presidente, la inseguridad se sigue sintiendo a lo largo y ancho del país, incluso en la tranquila Caraguatay, que vivió momentos de terror en la tarde de hoy.

Todo comenzó cuando un hombre de 35 a 40 años fue baleado en plena vía pública en el centro de la ciudad. Rápidamente, familiares y conocidos lo ayudaron a ir al hospital, con la intención de salvarle la vida. Dada la complejidad del cuadro, producto de las heridas que tenía, los médicos dieron aviso a los bomberos para que lo trasladen a Caacupé. Ahí siguió el pánico.

“La verdad que fue un momento de gran susto”, comenzó diciendo a C9N Juan González, capitán de los amarillos de la ciudad. “Intentamos trasladarle a Caacupé pero no pudimos porque sufrimos un atentado. Intentaron terminar el trabajo por decirlo de alguna manera, disparando contra la ambulancia en la cual iban la capitana con un voluntario además de un médico y una enfermera”, comentó.

Los disparos que hicieron a la ambulancia fueron de 4 a 5 de los cuales uno llegó a dar en la parte trasera, por lo que el chofer aceleró hasta llegar a la ciudad de Isla Pucú, donde se quedaron en la comisaría a pedir resguardo. Una vez que tuvieron resguardo policial siguieron camino hasta Eusebio Ayala (Barrero), donde finalmente se constató el deceso de la persona.

Según se supo, el victimario era un hombre en moto en tanto que la víctima terminó falleciendo como consecuencia de los primeros disparos que recibió.

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