Se veía venir… ¡y pasó! A pesar de todas las advertencias que se hicieron en torno a la peligrosidad de promulgar esta ley, lo mismo Marito le metió un autógrafo para que la misma quede vigente y ahora…

Se trata de la cuestionada ley que establece medidas administrativas para el financiamiento del Programa de Enfermedad y Maternidad del Instituto de Previsión Social (IPS) que fue impulsada, casualmente, por el sector colorado oficialista.

Esta norma permite al IPS endeudarse con entidades nacionales e internacionales con montos enormes cuyas cuotas no tienen que exceder el 5 % del presupuesto anual asignado para el ejercicio fiscal en el que se realice la operación financiera. Los pagos se cubrirán únicamente con recursos del Programa de Enfermedad.

Actualmente, solo a proveedores farmacéuticos se les adeudan 258 millones de dólares, aunque ese monto no fue demostrado fehacientemente.

Pedro Halley, exgerente de Prestaciones Económicas de la institución y experto en seguridad social, manifestó que, “este es un refrito de aquel primer proyecto que quedó archivado por el cual se apuntaba a endeudar al fondo de jubilaciones y vender todos los inmuebles. Y ahora se insiste con un nuevo proyecto que se centra en endeudar al IPS, con mucha picardía y con cierto eufemismo, para pagar la deuda de salud”.

A juzgar por el nivel de deuda que evidencia el mal manejo, todo hace suponer que cuando lleguen los vencimientos de las cuotas, bien podrían tocarse fondos que están destinado al pago de los haberes jubilatorios, que es el miedo que se tiene.