Mañana se juegan los partidos de semifinales de la Copa del Mundo en Qatar. Después de quedar eliminada la selección de Brasil, Larissa Riquelme pone todas sus fichas en Argentina. Pero ahora ya se está poniendo nerviosa, impaciente, ansiosa, esperando ese partido y, por supuesto, con ansias de ver a la única representante de Sudamérica pasar a la final.

Ya dijo que va a preparar un té, que no hay de otra. Y no es para ponerse a tono con el país organizador, donde la bebida oficial es el té, sino porque de alguna manera tiene que calmar los nervios mientras se desarrolle el partido.

«Mañana juegan Croacia y Argentina. ¡Por favor! Tomare un té de tilo desde hoy», dijo Larissa, quien es muy futbolera. Su fanatismo por el mundo peloteril no viene de su elección como «Novia del Mundial», sino desde mucho antes. Es sabido su fanatismo por Cerro Porteño y la Albirroja. Y, claro, cuando hay Mundial por todos los sudamericanos, pero más por Brasil y Argentina ante la ausencia de nuestra sele.

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