“¿Te acordás lo que era un invierno?”. En pocos años más, esta pregunta va a comenzar a sonar con frecuencia en varias partes del mundo. Y no es casualidad. Cada año que pasa, eso del “calentamiento global”, que muchos dicen que es un invento, sigue causando guyryry en varias partes del mundo. Y la cosa parece que no para, porque la temperatura sigue subiendo y la media de junio de este año fue de 16.5, la más alta de la historia. ¡Hendy!
Primero, ¿qué es la media y cómo es posible que “solo” 16 grados y algunas décimas sea la “temperatura más alta”? Te explicamos: la media, que no tiene nada que ver con eso que a muchos les gusta chupar, es la suma total de una cantidad de medidas divididas, justamente, por esa cantidad.
A nivel mundial, se tomaron las temperaturas, por decir, de los 197 países o estados que se tienen reconocidos. La suma total se dividió, a su vez, por 197 y arrojó como resultado 16.5º. Para hacerlo más fácil, si en el mes de junio que se fue, por ejemplo, en Paraguay hizo 22º promedio, en España 30º, en México 33º, en Australia 3º y en Sudáfrica 7º, se tiene que la media fue la suma de todo esto, en total 95, da 19º (al dividirlo en 5 que es la cantidad de países tomados como referencia).
Esta temperatura es la más alta de la historia y supera, de una, en 0,5º al promedio que se dio en 2019, la más alta desde 1991 a 2020. ¿A qué se debió esta suba? A temperaturas que batieron récords en el noroeste de Europa, mientras que, en ciertas partes de Canadá, Estados Unidos, México, Asia y el este de Australia «fueron netamente más cálidas de lo normal”, según el informe que se brindó.
“2023 está muy por encima de los demás: es un tipo de anomalía a la que no estamos acostumbrados”, explicó Julien Nicolas, científico del observatorio europeo Copernicus, uno de los entes encargados de la medición.
¿Y EN QUÉ ME AFECTA?
El tema es que a medida que sube la temperatura global sube la temperatura de los océanos. De una media “normal” de 17º que se tenía años atrás, ahora ya está llegando a 21,1º. Al calentarse el agua se produce más evaporación. Eso se transforma en lluvias. Las lluvias en inundaciones y más humedad en determinados sectores mientras que en otros las sequías pueden llegar a niveles mortales. De ahí su importancia. Y, muchas veces, con que varíe 2º a 3º ya es suficiente para armar sarambi.
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