El Parlamento francés aprobó una ley para regular la actividad de los influencers para poder controlar y frenar la prmoción de productos que puedan ser peligrosos para la gente.
La nueva norma busca, además, combatir los abusos de algunas «figuras» de las redes sociales, acusados de fraude y difusión de medicamentos no regulados por las autoridades de salud.
Se calcula que actualmente hay unos 150.000 influencers en Francia. Muchos fueron cañeados y denunciados por comunicar servicios relacionados con estafas y productos nocivos para la salud.
“La ley de la jungla se ha acabado”, dijo un diputado francés Arthur Delaporte, uno de los impulsores de la ley. He’i que que la normativa protegerá a los consumidores, en especial a los péndex, de las acciones de los “influladrones”, término con el que empezó a llamarse a este tipo de creadores de contenido.
La ley, prohíbe la divulgación de prácticas como la cirugía estética y prohíbe o limita la promoción de varios dispositivos médicos.
Además, los creadores de contenido no podrán promocionar suscripciones a apuestas deportivas y la publicidad de juegos de azar quedará limitada a las plataformas con medios técnicos para evitar que los menores puedan acceder.
También van a prohibir las publicaciones en redes sociales, el uso de animales cuya posesión sea ilegal.
Por último, en cada contenido los influencers deberán aclarar si las fotos publicadas han sido modificadas o retocadas con herramientas de edición digital.
Si no cumplen, serán multados y hasta pueden ligar cárcel.
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