En charla con Universo 970 AM, el productor Nico Garzia habló del concierto de Luis Miguel, que explotó de público ayer y dejó muchos plagueos por la apertura tardía de los portones y porque se fue la luz en medio del concierto.

«Los mismos equipos que usaron vinieron de Uruguay. Hubo un poco de tensión y explotó el generador», explicó Nico Garzia, presidente de Garzia Group, la empresa que organizó el concierto.

Dijo que el gran problema fue la alta temperatura, que durante el día llegó a 48 grados de sensación térmica y a la noche se mantenía por los 38 grados. «El problema fue el calor, eso hizo que se calentaran las consolas», explicó.

Dijo que, incluso, el concierto se iba a cancelar durante la tarde. «La realidad es que el concierto se iba a cancelar, entre las 14 a 16», confesó Nico.

Contó que para atenuar el impacto del calor en los equipos realizaron un trabajo de tres horas que consistió en “cerramiento de frío con aires acondicionado”.

En medio de reuniones y discusiones sobre todo el problema que generaría el insportable calor de ayer, principalmente a los equipos, finalmente decidieron que se haga el concierto.

Pero retrasaron el acceso del público, con la justificación de que la alta temperatura no termine colapsando al público y también al equipo de sonido y de luces.

Explicó que cuando los músicos hicieron sus pruebas (se sonido), recomendaron que los portones recién se abrieran a las 20 horas.

Finalmente, el equipo de sonido en medio del calorazo igual hizo colapsar al generador, pero para suerte del público, el show pudo continuar. Para muchos fue un milagro que Luis Miguel haya decidido continuar con el concierto.

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