Estar tras las rejas no les impide “trabajar”. Al menos no cuando es para hacer el mal. Así quedó en claro luego de una requisa que se hizo en la fecha en las cárceles de Misiones y de Emboscada, donde lograron dar con unos presos que se dedicaban a la extorsión y sextorsión.

La Unidad de Seguridad Información e Inteligencia Penitenciaria (USIIP) del Ministerio de Justicia, en coordinación con el Departamento de Antisecuestros de Personas de la Policía Nacional (DAS), fueron los organismos que rastrearon a estos fulanos para acabar con su “actividad”.

Desde la Policía Nacional se informó que se investigó a un tal Ronald quien es acusado de estar implicado en una red de extorsión y secuestro exprés. Recaudaban muchísimo dinero según se informó. El mismo había sido detenido en Cordillera.

Otro de los que cayó es un tal Marcelo, quien realizaba operaciones de extorsión desde la prisión, utilizando teléfonos móviles para activar copias de seguridad y continuar con sus actividades delictivas.

El mismo se encuentra en la cacerolita condenado a siete años por extorsión y coacción sexual, usando un perfil falso para extorsionar a una mujer. A pesar de las medidas alternativas, continuó con su actividad delictiva, resultando en su reclusión en Misiones.

Otro de los pillado fue Silvio, quien está imputado junto a otros por secuestro exprés y extorsión, parte de un grupo criminal. Este grupo se dedicaba a extorsionar y secuestrar a víctimas, principalmente a través de redes sociales.

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