Tiene solo 23 años. Y podría pasar muchos más en la cárcel. Pero, más allá de lo que pueda resultar en su condena, lo que más llama la atención y llena de preocupación en este caso es lo expuestos que están los niños y los adolescentes en las redes sociales. Es que a todas sus víctimas las contactó a través de diferentes plataformas.
La detenida es Alyssa Ann Zinger, de Tampa, Florida, quien enfrenta cargos por crímenes sexuales contra menores. Después de su primer arresto en noviembre, cuatro víctimas más se han presentado, elevando a cinco el total de menores implicados.
Las autoridades le imputan ahora dos cargos por actos libidinosos, dos por molestias lascivas a víctimas entre los 12 y 15 años, además de posesión y transmisión de pornografía infantil por dispositivo electrónico y acoso cibernético sexual.
Ella se hacía pasar por una chica de 14 años que buscaba mantener relaciones sexuales con chicos, algo a lo que llegó con uno de ellos en tanto que envió material explícito a otros. Se llegó a hablar de hasta 30 potenciales víctimas, por lo que su caso se está conviertiendo en emblemático donde se espera que la Justicia tome medidas más firmes contra aquellos que abusan de la tecnología para cometer estos crímenes.
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