La sesión de la Cámara Baja se estaba poniendo caliente. Los debates y las acusaciones iban y venían. Pero, en medio de toda esa tensión política, hubo un diputado que quería un poco de “relax”. Para “calmar las aguas” no tuvo mejor idea que llamar a su pareja y comenzar a manosearla y besarle los pechos. Todo hubiera quedado en la intimidad de no ser porque tenía ¡la cámara encendida de su compu! Sus colegas vieron todo.

El escándalo sexual se dio en Argentinat y tuvo como protagonista a Juan Emilio Ameri, del Frente de Todos, quien quedó al descubierto durante una sesión en línea que se desarrolló el 24 de septiembre de 2020, cuando la pandemia acechaba.

Casi cuatro años después, finalmente la Justicia se expidió sobre el caso y decidió condenar la acción del hombre con una pena ciertamente insignificante pero que, desde el punto de vista de los antecedentes, deja una huella importante en su legajo.

“Mi pareja se había hecho unos implantes mamarios y quería ver cómo le habían quedado” fue la excusa que dio el entonces parlamentario quien se disculpó asegurando que no sabía que la cámara estaba encendida. Ahora, el juez federal Ariel Lijo condenó a un mes de prisión en suspenso al “besucón”.