Eran conocidos. Cada tanto, solían coincidir en una bodega. Allí, ambos le estaban dando rienda suelta al trago. Pero, como pasa muchas veces, el alcohol y las discusiones se juran amor eterno hasta que la muerte se lleve a alguien. Y eso fue lo que pasó en una zona conocida como Calle Itay de Santaní. Un hombre murió cuchillo en mano, aparentemente para defenderse, al ser atacado por otro.

Hasta donde la Policía pudo averiguar, el agresor sería una persona de 32 años quien comenzó a discutir con el finado. En un momento dado, la cosa se puso por demás violenta y ambos sacaron cuchillos. El hoy prófugo fue más rápido y alcanzó a darle una estocada mortal a la altura de la cabeza. No había forma que se salve.

Consumado el crimen, quien mató salió huyendo del lugar sin que se sepa más nada de él. El cuerpo quedó tirado en un camino vecinal, boca abajo. En su mano derecho aún tenía un cuchillo tipo daga. La víctima no contaba con ningún documento de identificación, por lo que se debió realizar la prueba Afis para confirmar su identidad.