Hace poco más de dos meses, Blas Giménez fue víctima de un terrible accidente. Desde ese entonces, el pelotero surgido en la ciudad de Santaní, estuvo batallando por su vida con el apoyo de toda la comunidad. Finalmente, Dios se lo llevó a su equipo.

El arquero, a quien cariñosamente llamaban “Largo”, estaba yendo en una moto al entrenamiento de su club cuando sufrió un lamentable siniestro en el tránsito, que incluyó un fuerte impacto. Producto de este percance, resultó con una serie de lesiones de gravedad y roturas varias.

Compañeros de equipo, familiares y los muchos amigos que tenían comenzaron a realizar distintas actividades en la ciudad de Santaní con el fin de brindar apoyo económico al mismo, atendiendo a los innumerables gastos que demandaba su recuperación.

Por desgracia, el cuerpo le dijo basta y partió a la eternidad en esta mañana de Pascua, con solo 19 años. Diferentes instituciones deportivas, como el Deportivo Santaní, el Club Monte Alto o Union Agrícola, entre otros, lamentaron la partida de esta joven promesa.