La modelo Adela Alonso se dio recientemente el lujo de lanzarse desde aproximadamente 3.000 metros de altura, todo por cumplir un sueño que tenía de pequeña: el de lanzarse en paracaídas y sentir toda esa inmensa adrenalina.
La cuerona charló con Crónica y aseguró que, al recibir la invitación para saltar, simplemente preguntó dónde firmar y se puso a las órdenes. Fue grabada durante todo el tiempo que duró el salto y la caída, de modo a eternizar “su momento”.
–¿Fue tu primera vez saltando en paracaídas?
–Sí, fue mi primera vez y fue una tremenda experiencia, un sueño cumplido. Es más, ya estoy viendo la posibilidad de hacer un curso.
–¿Querés profesionalizarte en el tema?
–Me encantaría eso, primero son unos cursos que puedo tomar y después ir viendo la posibilidad de dedicarme de lleno a esto.
–¿Fue siempre tu sueño?
–Siempre soñé con volar; es más, de chiquita siempre miraba las avionetas a chorros y los helicópteros, corría como imaginando que podría alcanzarlos. Siempre que veía una pandorga, imaginaba volar y me decía a mí misma que de grande algún día practicaría paracaidismo.
–¿Por qué no lo hiciste antes?
–Pasa que nunca supe que había la posibilidad en nuestro país.
–¿Sentiste miedo en algún momento?
–Para nada. Cuando me dijeron “Adela ¿te gusta el paracaidismo?”, yo respondí: “Dónde firmo, de qué me tiro (risas)”. Fijé fecha en República Flyer con el profe Rolo y unas horas antes practicamos un simulacro y ya a la avioneta.
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