Los problemas comenzaron cuando ella descubrió un extraño mensaje de una mujer en el celular del marido, llamó al número y se enteró de unas cuantas cosas que abrieron la brecha de la desconfianza dentro de la relación.

Hasta hace poco me describía como una mujer felizmente casada, pero ahora no sé, parece que mi marido me engaña. Desde que encontré mensajes de tinte amoroso en su celular nuestra relación se volvió un infierno. Las dudas se adueñaron de mis pensamientos después de que la propia chica me contara que se metió con mi amor, a pesar de que él me juró que no hizo nada.

Cuando le encaré a mi pareja él me suplicó que no haga caso, que todo se trata de una mentira de la supuesta amiga para que nos peleáramos.

Cuando descubrí el mensaje amoroso, copié su número y le llamé para preguntarle qué era lo que había entre mi marido y ella, primero me negó que sean algo, se identificó como una amiga y nada más.

Después como le insistí, se enojó como una víbora venenosa, soltó que estuvieron juntos en un motel y otros detalles que me dejaron mal. Empezó a decirme dónde se encontraron, cuánto tiempo estuvieron, hasta me describió la ropa que llevó puesta, incluso el color de bóxer me dijo.

La chica inventó que yo fui la que empezó a mensajearle en tono amenazante, como para molestarle, siendo que lo único que le pedí fue tranquilidad para mi hogar.

Con mucho dolor le exigí que salga de nuestras vidas, porque no estaba dispuesta a pelear con mi marido por su culpa, hasta ahora no me molestó más.

Hace 15 días por ahí no hay más nada, ni un mensaje de la tipa y, tampoco mi marido no le llama más y yo no le voy a decir más nada de ella. Creo que con eso se cierra este caso, pero yo confiaba tanto en mi pareja, ahora no sé, pasamos muy malos momentos, casi me dejó por culpa de ella. ¿Qué puedo hacer para que mi relación vuelva a ser la de antes de que esta mujer se metiera en nuestras vidas?

MATILDA, DE VILLARRICA, 28 AÑOS

RESPUESTA: Asumir la situación, mirar hacia adelante, ya no se puede volver atrás para borrar el pasado, más bien, la actitud con la que se enfrenta un problema es lo que cuenta. Puede que sea más constructivo buscar, antes que culpables, las causas del porqué existen los cuernos, procurá hacer una evaluación con tu pareja del rumbo que va tomando la relación desde que se instaló la crisis. En el supuesto caso de que te haya pasado eso, a veces también uno ve fantasmas, condena a la pareja sin darle el mínimo derecho a la defensa. Tenés que entrar también en la cuenta de que hay gente que prefiere echar más leña al fuego cuando se percatan de que están en presencia de alguna persona celosa, como que “disfrutan”. Pero si efectivamente tu pareja es “cabezuda” no basta con hablarlo, talvez necesiten de ayuda extra para superarlo. Trabajar juntos para sellar las heridas que deja el resentimiento, fijate que sin desacreditar que ambos estén sufriendo por la situación, el que se siente víctima de un engaño pareciera que sufre más y la sociedad colabora con eso. Toda la carga emocional, culpas, miedos, burlas, van más para el que fue víctima del infiel, en pocas palabras del que se espera una reacción desde la “tarjeta roja” hasta el “chute”. Lo ideal, enfrentar la situación, llegar a un acuerdo pacífico, un compromiso de trabajar juntos por salir adelante o seguir cada quien un camino diferente, antes que rebose el vaso.