La cantante Katy Perry fue la encargada de cerrar la última noche de la última edición de Rock in Rio. En un momento del show, la artista estadounidense invitó a una fan a subir al escenario. La chica, llamada Rayane, no paró de besarla en el cuello, inclusive le chupó la zona y antes de bajar tocó el trasero de Perry.
La joven, aparentemente ebria y bastante emocionada, acariciaba a la cantante, mientras ella trataba de superar el momento incómodo frente a los miles de asistentes. “Tiene la piel muy suave” ha declarado la fan.
Comentarios