- POR SU CUMPLE. Para agradecerle todo su sacrificio y cariño, sus hijos organizaron un viaje para que celebre su aniversario de vida en su querido pueblo
CIRO ACUÑA. Especial.
José María Astigarraga Gómez, conocido como don Chiquito, nació en Fuerte Olimpo, Chaco paraguayo, distante a 760 kilómetros de Asunción, un 24 enero de 1928.
Hijo de Hilario Astigarraga y Petrona Gómez, hoy con todos sus años aún recuerda por ejemplo los tiempos de la Guerra del Chaco, cuando el sonar de las sirenas le obligaban a buscar refugio; su viaje en tren a Villarrica, castigado, en épocas de la revolución, siendo él soldado de la Marina y su posterior destierro al Brasil.
Los avatares de la vida lo llevaron a Asunción, donde fijó residencia. De profesión Contador Público, trabajó en varias empresas hasta terminar la secretaría general de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Asunción, donde estuvo más de 40 años.
Casado con Gilda Maidana Roig, es padre de 5 hijos (Lourdes Noemí, José Luis, Pablo Enrique, Gilda Fátima y Jorge Javier), 11 nietos y un montón de sobrinos, a quienes siempre inculcó los valores que cultivó en su vida.
Mañana don Chiquito cumple nada más y nada menos que 89 años y, como ese adagio que dice “en vida, hermano, en vida”, sus hijos agradecidos le dieron el regalo más emotivo que habrá recibido en su vida: un viaje a su amado Fuerte Olimpo.
El emotivo viaje se hizo realidad el pasado sábado 21. Don Chiquito pisó esa tierra que le vio nacer después de casi 60 años. Las palabras y talvez las imágenes jamás podrán reprisar los sentimientos que lo envolvieron, eso quedará en su corazón y en su intimidad por siempre.
Talvez ahora mismo, con el mismo entusiasmo, estará recordando algunas anécdotas de su vida, rodeado de quienes tienen la dicha de tenerlo, en algún corredor o lugar de su querida ciudad natal.
Hizo valer su profesionalismo ante las presiones políticas
No está afiliado a ningún partido político, pesar de las presiones que ha recibido por estar en un cargo, don Chiquito se mantuvo apolítico e hizo valer su profesionalismo ante las presiones políticas. Luego de sus 40 años de servicio como secretario general en la Facultad de Ingeniería, se retiró para gozar de su jubilación y no hay egresado de su época que no lo recuerde por su probidad y don de gente.
Déjanos tus comentarios en Voiz