Universo 970 AM
En vivo
Universo 970 AM
Ahora suena
Radio Montecarlo
Ahora suena
HEi
Ahora suena
Radio Corazón
Ahora suena

Desafió a Pablito, y este le cumplió su deseo he’i

Desafió a Pablito, y este le cumplió su deseo he’i

Hace 22 años que doña Norma Ferreira (54) tiene su comedor al lado mismo de la capilla San Pablo, más conocido como Kurusu Pablito (Ypacaraí), y no se trata de una casualidad que se llame justamente “Comedor Pablito”.

Y es que, según el relato de ña Norma, el angelito le cumplió un deseo muy grande: le dio para su terreno, su casa y su negocio.

Siempre va a rezarle a Pablito en su altar.

 

El tema es que ña Norma no creía en el “niño milagro” del que todos le hablaban, pero un día lo puso a prueba, lo desafió y él le respondió al día siguiente.

“Yo me había quedado sin mi negocio, luego de mucha lucha había conseguido alquilar un lugar acá (en Ypacaraí) y puse mi comedor. Era mamá soltera (dos niños), me había separado recién y trababa de salir adelante.

Un día me quedé sin alquiler (ahí vivía y tenía su comedor) y tenía que ver dónde mudarme. Me desesperé tanto y acudí a Pablito”, empezó relatando ña Norma.

La doña explicó que ella no creía para nada en que Pablito era milagroso. “Siempre creía en la Virgen y en Dios, nada más, después decía que todo eso era mentira. Le hablaba mal a la gente de Pablito.

Pero una noche -desesperada- me fui a su altar y le desafié, le dije que quería un terreno, quería una casa y un negocio, y que ya no quería andar de alquiler en alquiler”, siguió.

Al día siguiente, un muchacho que vende terreno se le apareció a ña Norma y le dijo que ella tenía un terreno a su nombre y le propuso vender.

“Se trataba de un terreno que había comprado a cuota yo hace 10 años y solo pagué una cuota de 10 mil guaraníes”, contó.

Ña Norma relató que llamat ivamente el la ya no adeudaba más por ese terreno y que figuraba como dueña.

Ella vendió esa propiedad y así pudo comprar su terreno al lado de Kurusu Pablito.

 

En una semana ella ya tenía su terreno y construía su casa

Devotos que van a refrescarse en sus aguas.

 

El sacrificio de doña Norma fue muy grande. Ella construyó su casa y su comedor con mucho trabajo, pero no puede negar que Pablito tuvo mucho que ver en eso también.

“Tampoco tenía plata para construir una casa y un ingeniero me dijo que me iba a hacer todo por 1.500.000 guaraníes y el papá de mis hijos me consiguió el dinero.

Una semana después de que le pedí a Pablito yo ya tenía mi terreno y estaba haciendo mi casa”, relató.

La cocinera contó que le llegan muchos clientes hasta ahora y que ya escuchó varios testimonios de fe donde Pablito intervino.

“Curó enfermedades terminales, sacó de la quiebra a muchos, de todo uno escucha”, finalizó.

 

Pablito, el bebé que murió de sed

Pablito en 1945, cuando murió de sed.

El pequeño Pablito era un bebé de tan solo 9 meses, quien –según los relatos– murió de sed en 1945 en Ypacaraí, cuando peregrinaba con sus padres junto a la Virgencita Azul, un 7 de diciembre.

En el lugar en el que respiró por última vez empezó a brotar una especie de agua “milagrosa”, ya que cuentan que basta tan solo beber de ella para que ocurra algún milagro o que cumpla los pedidos.

A partir de allí nació en su nombre lo que hoy conocemos como Kurusu Pablito, una capilla donde la gente va a rezarle, a pedirle cosas y también a ofrendarle.

 

Compartir en redes

Comentarios

En vivo
Universo 970 AM
Ahora suena
Radio Montecarlo
Ahora suena
HEi
Ahora suena
Radio Corazón
Ahora suena
Crónica