TEMPRANO. Muy joven se acompañaron; la rutina, los problemas y su apego por otras mujeres pudieron más que el amor.

Hace 5 meses que perdí a una mujer que prácticamente me tuvo en un altar y ahora soy yo el que se comporta como un celoso maniático, pero es producto de la costumbre, lo que quiero es que me pase este trago amargo del adiós y nada más.

Pienso que mi ex volverá, pero después de que se aburra de tanto sexo y alcohol, pero yo ya quiero recuperarme, y me cuesta. Pienso que me junté temprano con alguien y modifiqué totalmente mi estilo de vida o los proyectos que tenía por realizar. Luego vinieron las criaturas y mi responsabilidad se duplicó, por ende mi carácter. Me volví argel, agresivo, insoportable y asquerosamente infiel, y lo que quería decirte es que hasta le pegaba. Pero bueno, eso lo dejo en manos de Dios que me juzgue, pero aún así este ángel seguía firme a mi lado, pero creo que se cansó, no de amarme sino momentáneamente de luchar por mí. Ahora le gusta un pendejo, el sexo que le ofrece, y las salidas con amigos acompañadas de alcohol, creo que se merece porque fui terrible con ella, creo que tengo merecido y que hay hombres que ya deben entender que la paciencia de una mujer es incomparable y que no hay que abusar de tal cosa porque terminamos perdiendo grande.

Le metía los cuernos, pero te digo de corazón que no lo hacía a propósito, solo quería huir de la monotonía, del aburrimiento, de sus celos, etc., creo que ella está haciendo lo mismo. Por eso me considero un buen perdedor, ojalá que este muchacho la trate bien. Solo quiero saber si espero que se canse o deje de gustarle la relación que lleva con este hombre o cierro definitivamente este capítulo con ella y vuelvo a comenzar mi vida, desde ahora. No me explico cómo nosotros los hombres valoramos lo que tenemos recién cuando lo perdemos. Tenemos hijos de por medio y eso me hace sentir más culpable.

Me volví argel, agresivo, insoportable y asquerosamente infiel, y lo que quería decirte es que hasta le pegaba.

PEDRO, DE VILLARRICA, 34 AÑOS.

LA RESPUESTA: RELACIONES QUE NO SUMAN, SINO RESTAN

Sanar las heridas con el tiempo

Puedes esperar toda la vida por un amor, tu corazón, tu voluntad, tus metas son las que definen hasta cuándo, lo que debes evitar es acumular tristeza. Sería bueno que te desahogaras, hables con alguien de esas cosas que aún te duelen y después planificar lo que quieres hacer.

Si estás convencido de que la amas, luchá por ese sentimiento pero si es solo es orgullo del momento, es mejor darle tiempo al tiempo, hasta que sanen las heridas.

Ahora, si te das cuenta que la relación es tóxica hay que buscar ayuda, porque no favorecen para nada tu desarrollo personal, tu felicidad ni tu autoestima sino que por el contrario, son una fuente de frustración, insatisfacción, culpabilidad, ansiedad y una mezcla de emociones bastante desagradables. Es una relación que no suma sino resta, pero hay parejas que están dispuestas a realizar un último intento por reconstruir lo que se rompió, como dos personas adultas pueden replantear un nuevo acuerdo, ya sea para volver o que cada uno vayan por caminos separados.

Si hay hijos de por medio siempre habrá un contacto y es preferible que sea lo más amistoso posible. Ellos siempre van a necesitar de los dos.