Familiares de internado por covid tuvieron que sortear el coche de la familia, pero el ganador les dio otra vez el premio.

• POR GUSTAVO VILLAMAYOR

La lucha sin descanso en contra del covid-19 hace que los familiares de las personas infectadas hagan malabarismos y algo más para soportar el duro golpe emocional y económico.

Los familiares de don Cayo Ramón Franco Butterworth (49) no tuvieron otra que sortear el auto de la familia para tratar de generar ingresos para pagar la sala de terapia intensiva.

Pero por lo visto la fortuna quiso que un joven de Minga Guazú sea el ganador del auto, afortunadamente para la familia del enfermo, ya que el muchacho devolvió el rodado otra vez a los familiares del internado.

“Yo creo que cualquier persona iba a hacer lo que yo hice. Este era un sorteo para ayudar a un enfermo y yo colaboré para ayudarlo, en ningún momento creí que iba a ganar. Además lo hice para ayudarle, legalmente no estaba en mi mente que podía ganar”, tiró el joven Cristian Antonio Vera Román (30) a Crónica.

Luego comentó que “el día del sorteo, yo estaba en mi trabajo y me llama una persona para avisarme de que me gané el auto, no le creí y le corté. Entonces le llamo yo de vuelta a la persona y le dije que le iba a devolver el auto, que yo no me iba a quedar con el vehículo.

Se sorprendió por mi respuesta y le confirmé de nuevo que le iba a devolver el auto, ellos van a necesitar de ese auto para llevarle a su papá”, tiró Cristian. Y luego dijo: “Yo solamente compré las boletas con la intención de ayudar nada más. No me iba a quedar tranquilo si no devolvía”.

“Todo el día tuve llamados de felicitaciones de todos lados”

Cristian trabaja en una empresa ubicada en la ciudad de Hernandarias, a donde acude todos los días desde Minga Guazú. “Yo trabajo en una empresa que queda en Hernandarias, yo soy de Minga Guazú, y todos mis compañeros me felicitaron, mis jefes, todo el día de ayer tuve mensajes y llamados de felicitaciones de todos lados, de personas que no conozco, no pude trabajar porque atendía mi teléfono para recibir felicitaciones por mi gesto, pero creo que cualquiera iba a hacer eso, ya que la familia del enfermo quedó mal económicamente”, comentó.

“Mis familiares están muy contentos porque devolví otra vez el premio, ellos me apoyaron al ciento por ciento. También mi novia quedó muy emocionada con el gesto que tuve”, agregó el joven.

“Una ola de bendiciones”: don Cayo también ya salió de alta

La familia Franco recibió dos bendiciones en un día, se le devolvió el auto y además el señor Cayo fue dado de alta. “No sabés cómo fue nuestro día, recibimos olas de bendiciones”, fue lo primero que dijo Jessica Franco, la hija de don Cayo, a nuestro medio.

Jessica nos contó que “gracias a la gente que colaboró con nosotros con la rifa, pudimos pagar los 120 millones por 5 días de internación en el sanatorio privado. Ahora quedan otros gastos para la rehabilitación de papá. En cuanto al auto, por el momento se va a quedar pero si hace falta, luego vamos a tener que venderlo porque papá va a requerir unos seis meses de terapeutas para poder recuperarse al ciento por ciento”, contó.