Niel Luango contó que ipochy por el guyryry que hicieron mientras mucha gente sigue en duelo por culpa del virus maldito.

Un guyryry de la gran siete despertó a tempranas horas a todos los vecinos del barrio San Rafael, de Loma Pytã.

Con batucadapu se armó su mitin político en pleno día de descanso y generó la indignación de muchos.

Pero Niel Luango no se guardó ni un poco la rabia que sentía en el momento y salió a enfrentar a todos los que formaban parte de esa caravana.

Por medio de un vivo mediante el Facebook, el joven compartió el enfrentamiento que tuvo con los hurreros en campaña a quienes calificó de irresponsables debido a que armaron feroz aglomeración en plena crisis sanitaria.

“Me indigné porque amo a mi país y me duele ver cómo la corrupción está siguiendo. Escuché todo el ruido que estaban haciendo y salí. Lo hice por mis vecinos que murieron por falta de oxígeno, de camas o de ambulancias. No es posible que sigamos así”, mencionó a Crónica el joven escrachador.

Explicó que mientras muchas personas están luchando en los hospitales por salvar sus vidas sin insumos médicos, estas personas se están juntando en los barrios sin el mínimo cumplimiento del protocolo sanitario esparciendo el virus ápe ha pépe.

El joven consideró una falta de respeto que los politiqueros salgan a hacer sus campañas mientras que varios trabajadores, especialmente los del rubro gastronómico, no pueden laburar por culpa de los polis que pescan por ellos ni bien llega el horario de restricción.

“Esa gente no puede trabajar con ellos, es culpa de la Justicia que solo persigue a la gente trabajadora”, tiró el joven.

“Me amenazaron de muerte, me agredieron”

Niel contó que muchos de sus vecinos fallecieron por culpa del virus, mientras otros siguen en la dura lucha.

Explicó que es injusto que los candidatos gasten dineral en campañas mientras que la necesidad golpea las puertas de las salas de los hospitales y termina matando siempre a los pacientes.

Contó que tras el escrache recibió todo tipo de amenazas y cañeos, pero contó que no se arrepiente de nada de lo que hizo. “Me amenazaron de muerte, me agredieron, me dijeron de todo. En mi propio barrio me amenazaron y me corrieron, me dijeron andá dormí”, comentó el joven. Explicó que sintió mucha indignación por el tremendo sarambi que armaron en el barrio además del tremendo robo que siempre le hacen al país.