Fiorela Zavala es una pequeña de 9 añitos de edad que nació con una atrofia muscular que hace que ella vaya deteriorándose con el tiempo.

Su gemela Florencia ya no aguantó y falleció hace tres años, pero ella sigue aferrándose a la vida.

Este sería su noveno año que festeja el día de los Reyes Magos dentro del Hospital Niños Mártires del Acosta Ñu de San Lorenzo, que viene a ser prácticamente su casa, según nos comentó Mabel Medina, mamá de la niña.

“Cada año vienen funcionarios disfrazados de Reyes Magos y esas cosas le encantan a ella. También recibe muchos juguetes, pero yo les dono a los niños de asentamientos porque por su estado ella no mueve las manos y no usa. Lo que sí le gustan mucho las gomitas para el pelo y esas cosas”, empezó contando la madre.

Contó que fue muy difícil para ella aceptar que no había cura para la enfermedad de sus dos hijas, pero que con el tiempo logró superar la situación.

“Me acomodé a la situación y lo acepté. Incluso puedo decir que yo estoy bien, me siento feliz, porque mi hija es feliz. Ella se acostumbró a su habitación, su tele, ese es su mundo, no conoce el juego, los juguetes, pero es feliz así”, relató la madre.

Ellos consiguieron una casa cerca con su marido para estar con su pequeña y, como cada año, compartirán con ella la alegría de los Reyes.

Jennifer pide una piletita

La pequeña Jennifer León (8) pidió el mes pasado un nuevo corazón a Papá Noel. Ella está a la espera de un donante con la esperanza y sueños que todo niño inocente tiene. Virginia Aguilar, madre de la niña, contó a Crónica que a los Reyes Magos su pedido ya es una piscina.

“Me dijo ‘yo quiero mamá una piscina para bañarme con mi hermanito cuando me cure, porque la bicicleta no voy a poder usar mami’”, contó.

A pesar de que aún es chiquitita, ya entiende muchas cosas. Lo que más le gusta a Jennifer es estar linda, bien peinada y ser coqueta, he’i.

“Nuestro pedido de siempre como padres es que aparezca el donante. Apareció en estos días uno pero lastimosamente no era apto”, afirmó y agregó que siguen con esperanzas intactas.

Liz solo quiere una tablet

Liz Ávalos (11) recibió un trasplante del corazón hace 4 años. La pequeña batalló mucho para poder salir adelante con el nuevo órgano, aferrándose a la vida y ganando la batalla.

Ayer fue a realizase un control de rutina en el Hospital Niños Mártires del Acosta Ñu y este viernes festejará su cumpleaños número 12. Nos dijo, en tono de broma, que espera “doble regalo por lorreye” por ser valiente.

Al consultarle qué esperaba como regalo dijo que ya pidió una tablet, pero su abuela Rufina, que es la que le cuida, ya le dejó en claro que ella no podrá comprarle tal cosa, ya que solo vive de la venta de remedios yuyos. Así que, quizás algún “rey” anónimo capaz pueda cumplir su sueño.