NARIZ VENDADA. Jonathan Fabbro había ido a parar a una clínica después de recibir un codazo en pleno chute con su equipo en México, lo que le dejó la nariz rota. De ahí en más, Larissa Riquelme lo acompañó en todo momento y a diario se encargaba de compartir en redes, fotografías suyas cuidando y mimando al excerrista.

Finalmente en la noche del martes, “Shony” y Lari abandonaron la clínica después de una minicirugía que le practicaron al pelotero, quien además ofreció una conferencia de prensa, para detallar lo que será su proceso de recuperación. Por su parte, siempre en redes, Lari agradeció al otorrinolaringólogo que atendió a su “pierna peluda” y a todas las personas que demostraron preocupación para con la pareja.

Vale mencionar que hace unas semanas, Lari había dicho que quiere convertirse en cronista deportiva, de algún canal charro de deportes, que por el momento aún no se le da.