- PASÓ UN AÑO. El don recuerda a su pequeña, y cómo pasaban juntos en esta fecha tan especial. “Sé que ella estará con nosotros en la mesa, a mi lado”, dijo
Por Rodrigo Valdez – rodrigo.valdez@gruponación.com.py
18 de junio del 2016. Una fecha que el matrimonio Paredes-Zanotti prefiere olvidar. Ese día les llegó una noticia de esas que ningún padre quiere escuchar. Su única hija, Vivi, recibió un balazo.
Los responsables fueron agentes de la Senad, tras un mal procedimiento. Dos días después, la niñita dejó de brillar en este mundo para convertirse en un ángel.
Pasó un año y hoy Miguel Paredes pasará el primer Día del Padre sin su pequeñita, quien además era su mejor amiga, pues todos los días hablaban y jugaban de todo en el patio de la casa.
“Yo sé que desde el cielo me está gritando ‘felicidades papá’”, dijo don Miguel con la voz quebrada al recordar a su hijita.
“Voy a extrañar que venga corriendo, me felicite, desayunemos y luego almorcemos juntos en este día tan especial para todos los padres”, agregó.
El dolor sigue entero para la familia. El vacío está presente. Conciliar el sueño les resulta difícil y también a veces les falta el apetito. Aunque la compañía y apoyo por parte de familiares y amigos no faltaron en todo este tiempo, el dolor sigue intacto.
Vivi tenía toda la vida por delante. Si su familia tuviera que elegir tres adjetivos para recordarla, dirían que era buena (no sabía lo que era el mal), cariñosa y juguetona. Pero por sobre todo buena hija y puro amor. Era muy pegada a sus padres.
“Justo coincide (el Día del Padre) con la fecha en que recibió aquel disparo. Sin dudas, hoy es un día diferente para mi familia y, por sobre todo, para mí. Pero sé que ella estará con nosotros en la mesa, a mi lado, mimándome, dándome cariño”, dijo.
3 años
Tenía Vivi cuando sucedió aquella terrible tragedia.
“Nuestro refugio es Dios y Él nos mantiene en pie”
“Extraño mucho su sonrisa. Con Vivi se fue una parte de mi alma. Trato día a día de demostrar fortaleza, más por mi familia, por mi esposa (doña Ana Romina Zanotti). Ambos nos apoyamos y tratamos de seguir para adelante. Nuestro refugio es Dios y Él nos mantiene en pie”, dijo don Miguel. “En este Día del Padre y todos los días de mi vida me pasaré pensando en Vivi. Ella es el ángel que nos cuida desde allá arriba”, finalizó.
El caso
La tragedia ocurrió el 18 de junio del año pasado en Nueva Italia. Agentes de la Senad balearon una camioneta en la que iba Vivi, quien se llevó la peor parte
Justicia
El caso sigue en su etapa investigativa. La familia Paredes Zanotti solo pide justicia y que los responsables de este hecho paguen por lo que hicieron.
Déjanos tus comentarios en Voiz