CHUPÓ Y CHOCÓ. Tras haber tomado todo lo que había a su paso se terminó llevando por delante a otro vehículo y fue ahí que se le pilló el chupi

LAMBARÉ. El récord nacional del “chupitest”, “peleado” por aquellos que hicieron estallar los aparatitos que se usan para pillar a los “tatácho”, era ostentado por un encarnaceno, quien en el mes de setiembre arrojó 4,463 mgl.

Pero ese título fue roto ¡de taquito! por otro gran valor quien se chupó hasta el agua del water. Se trata ni más ni menos que de un personal militar identificado como Elvio Cuevas Báez, quien es vicesargento 1º. del Escolta Presidencial.

El tipo no quiso que terminara el año sin dejar su “marca” y estableció un nuevo récord que para nada será un orgullo para los lambareños. Al momento de protagonizar un accidente le hicieron soplar la pajita para ver cuánto se había tragado, arrojó ¡6,300 mgl de alcohol en la sangre! Esta marca pudo haber sido mucho mayor dependiendo del tiempo en que se tardó en hacer dicho procedimiento.

El doctor Luis Fleytas, director de la Décima Región Sanitaria, mencionó a Crónica que esta es una cifra sin precedentes y que una persona que no está preparada no podrá resistir semejante cantidad de alcohol. He’i que también depende bastante del organismo de cada persona.

En este caso el duro entrenamiento militar por lo menos le sirvió para soportar semejante tragada y no quedar inconsciente, incluso en coma.

Para completar su situación terminó chocando su rodado contra otro vehículo dejando daños materiales.

INCREÍBLE

Según los especialistas en la salud esta cantidad de alcohol en el organismo muchas veces termina tumbando a la gente, provocando incluso un coma.