El compatriota Gustavo Cristaldo, el zurdo que la mueve en la cancha, habló del fútbol, libros y hasta de la comida que extraña.

• Por Arturo Rojas C.

Uno que juega bien a la pelota, pero que también “lee bien” los momentos del juego. Gustavo Cristaldo (32), compatriota que juega en Independiente Petrolero de Bolivia, habló con Crónica de todo y un aspecto quizá poco conocido en él para el ambiente futbolero.

“En la vida y en el fútbol uno debe saber aprovechar al máximo las oportunidades; ahora, después de muchos años, puedo decir que tengo una carrera respetable, pasé por muchos momentos lindos gracias al deporte y me gano la vida haciendo lo que me gusta, es lo que siempre trato de hablarles a los más jóvenes que empiezan en el fútbol, no hay que dejar pasar las oportunidades”, confesó Gustavo.

Justamente, le tocó en una de sus aventuras futboleras aprovechar para abrir más su mente. Y lo hizo leyendo, gracias a la “soledad”, ponele. “Cuando estaba jugando en Chile estaba solo, entonces en mis ratos libres me ponía a leer y me gustó bastante, empecé a leer de todo, de fútbol mismo, sobre psicología, finanzas, cómo administrar las ganancias, sobre nutrición también, y así fue algo que se dio y que me abrió mi forma de pensar, de que no se termina la vida cuando uno cierra su carrera”, reconoció el zurdo. “Padre rico, padre pobre”, de Robert Kiyosaki, es uno de los libros cabeceras de Cristaldo, según comentó, pero también hay fútbol en su hábito de lector. “Los de Pep Guardiola, ahora justamente mandé pedir el libro de Javier Torrente, también leí cosas del ‘Loco’ Bielsa, es una costumbre sana y que ayuda para los deportistas”, finalizó.

Trabajar en formativas y el aprendizaje en el Gumarelo

Gustavo Cristaldo ya tiene el título de entrenador, de la Escuela Nacional de Educación Física, y quiere seguir ligado al fútbol tras el retiro (aclaró que falta mucho para eso). “Me gustaría trabajar en formativas, enseñar a los chicos no solamente el fútbol en sí, también a ser mejores personas y profesionales fuera de la cancha”, comentó el caacupeño.

Algo que destacó Cristaldo es la buena formación que tuvo en Libertad, donde empezó, llegó a Primera y hasta gritó campeón. “En Libertad sus inferiores es muy completo; más allá de lo deportivo, nos incentivaban al estudio, a aprender idiomas, computación”, recordó.

La combinación caacupeña que extraña bastante

La butifarra con chipa, o “butichipa”, como le dicen los muchachos, es una combinación gastronómica purete y el menú principal de los peregrinos camino a Caacupé. Gustavo Cristaldo, como buen caacupeño, no se olvidó de su ciudad.

“Ndi, lo que más extraño es la comida, legalmente, ahora pienso en una chipa con butifarra y chemopirîmba, estamos por entrar en la época donde hay mucha festividad en Caacupé; pero bueno, ahora me toca estar lejos de eso, vía online nomás voy a seguir toda la festividad”, comentó entre risas el futbolista de Independiente.

Jugar más tiempo y si es en el exterior, mejor

Triunfar en el exterior es lo que busca Gustavo Cristaldo, quien ya tiene títulos locales con Nacional y Libertad. “Ya estoy muy adaptado a lo que es el fútbol boliviano, es bastante competitivo acá porque influyen muchas cuestiones como el clima, no es para nada fácil como muchos piensan, pero mi idea es seguir muchos años más por acá o en otro lugar, me siento muy bien todavía en lo físico para seguir estando en el ruido”, dijo el volante.

En el fútbol del exterior, Cristaldo tiene una carrera por estos clubes: Cobreloa, Universidad de Concepción (Chile), Fuera Amarilla (Ecuador) y actualmente Independiente Petrolero de Sucre, en Bolivia.