Se inició en la Franja, donde debutó y estuvo varios años. Luego jugó en varios equipos. Y recordó una cábala mbarete con Luis Alberto Cubilla.

• Por Juan V. Duarte

Fueron varios años en Olimpia, donde debutó muy joven. Estuvo en el plantel campeón 2011, aunque no le tocó jugar muchos partidos. Sin embargo, Víctor Hugo Matta (31 años) lo recuerda en forma emotiva por todo lo que aprendió estando en la Franja, junto a varios jugadores top de la época.

“La verdad que jugar y debutar en la Primera del Olimpia me dejó muchas enseñanzas, desde las inferiores luego. Tuve compañeros top como Carlos Bonet, “Pipino” Cuevas, técnicos como Mauro Caballero en la Reserva. Él me llevó a la Primera y es algo que valoro muchísimo”, afirmó en charla con Crónica.

Agregó que esa etapa y la fuerza de la marca Olimpia en torneos internacionales lo dejaron bien marcado. “Me tocó estar en el plantel del 2011, con el profe Gerardo Pelusso, que salió campeón, campeonatos en Reserva y vivir de cerca una final de Libertadores (2013), donde pude ver de cerca a jugadores como Ronaldinho, creo que fueron los momentos únicos, imborrables y los más resaltantes que me tocaron vivir”.

Ya posteriormente, Víctor recaló en Gral. Díaz, con el que también disputó la Copa Sudamericana. “Estuve en Gral. Díaz dos años y después en General Caballero de Zeballos Cué. Fue ahí que dejé el fútbol cerca de un año y medio y volví para jugar en Tacuary en el 2018. También en Rubio Ñu y luego nuevamente a Tacuary, donde logramos estos dos ascensos seguidos”, señaló.

El gran sueño de Víctor es volver a jugar en Primera División. “Ojalá se me pueda dar y si no, bueno, tener la posibilidad de seguir en la División Intermedia”, concluyó.

“Fue infartante la forma en la que logramos el ascenso”

Para Víctor, el ascenso con Tacuary tuvo un sabor especial por la forma en que se logró. “Siempre es más emocionante lograr el ascenso de la forma como lo logramos nosotros, en la última fecha, donde festejamos todos”.

Recordó el penúltimo partido ante Santaní, que lo empataron sobre la hora. “Uff, ese partido fue infartante, complicado, por el estado del campo de juego, creo que recién ahí dijimos que estábamos por ascender, más todavía porque fuimos de menos a más en el campeonato, levantamos el nivel y logramos muy buenos resultados que nos hizo llegar al objetivo”, remarcó.

La ya famosa cábala de Cubilla y el cambio de color de botines

Matta no es cabalero, pero el que sí lo fue y públicamente fue el recordado Luis Alberto Cubilla. El “Negro” detestaba el color verde y Víctor lo sufrió en carne propia cuando fue promovido a Primera.

“Recuerdo que llegó Cubilla e íbamos a empezar la práctica. Y como en esa época estaban de moda los botines verdes, muchos de los jugadores entramos con ellos para entrenar. Cuando apenas nos vio nos mandó a sacar a toditos.

Al día siguiente, todos ya teníamos los botines de color negro. Creo que el color verde de la cancha no podía mandar pintar nomás, por eso no lo hizo, jajaja”.

Como contador con su padre y futuro arquitecto

Víctor siempre fue consciente que su vida no terminaba en el fútbol y en los últimos años, sobre todo durante la pandemia, trabajó como ayudante de su padre en su estudio contable. “Estudié contabilidad durante dos años y en plena pandemia trabajé con mi padre en su estudio contable, de hecho hasta ahora lo sigo haciendo”, añadió.

De todas formas, comentó que su futuro más inmediato está en la Arquitectura, cuya carrera viene cursando en la Universidad. “Ahora mismo estoy por cursar el quinto semestre de arquitectura, lo dejé un poco por la pandemia, pero ahora lo voy a retomar, porque sé que el estudio es importante”, comentó finalmente.