Lauryn Goodman, quien saltó a la fama como novia del pelotero Kyle Walker, con quien dio a luz estando él casado, se descargó con todo en Instagram para quienes la acusaron de querer sacar tajada de esta “aventura”. “Nunca dije que Kyle era el padre de nuestra hija. Se suponía que era un asunto privado”, aseguró la mujer, como diciendo que no sabe quien filtró la información.

“Esto se dio a conocer, sin mi consentimiento o conocimiento en los medios de comunicación. En mi opinión, desde el momento en que se hizo pública, se inició una campaña de desprestigio contra mí y mis hijos. Continuamente se publicaban artículos falsos y se han seguido publicando para adaptarse a la versión que se está difundiendo”, apuntó Lauryn.

Luego que Walker dijera que tener hijos con Lauryn fue un “error”, ella saltó con todo y dijo que “escuchar eso de su padre fue inimaginablemente cruel. Para mí como madre fue lo más doloroso del mundo. Son niños hermosos, maravillosos y se lo merecen todo. Es horrible que nuestros hijos algún día tengan acceso a esos vídeos y palabras. Me rompe el corazón”.

Después fue más allá y dijo, en entrevista a Daily Mail, contó que “fui yo quien terminó con Kyle. Si hubiera querido, podría haber seguido teniendo una familia secreta. Pero ya no pude soportar la toxicidad y me di cuenta de que no era bueno para mis hijos”.

Lauryn Goodman brindó la nota periodística en su casa de siete habitaciones valuada en 2,4 millones de libras (más de USD 3.000.000) comprada por Walker para ella a las afueras de Brighton, que incluye piscina, bañera de hidromasaje y vista al mar, según contó la reportera Katie Hind, quien le hizo la entrevista.

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